
"Por primera vez en años, logré dormir sin mil pensamientos dando vueltas. Sentí que mi mente podía descansar de verdad." - Ana, 34 años

"Al principio no creía en estas cosas, pero necesitaba un cambio urgente. Ahora entiendo que la gratitud no es fingir que todo está bien, sino encontrar anclajes de paz en medio del caos."